Un joven llamado Roman Atwood decidió jugarle una broma a su novia haciéndole la confesión falsa de que le había sido infiel.
Decidió dejar una cámara oculta en la habitación para capturar el momento de las expresiones de su querida novia.
No contó con que su novia Britney se decidiera a hacerle la misma confesión: Que ella también lo había engañado.
De acuerdo con Dailymail, la broma, que se realizó en Aruba para celebrar el quinto aniversario de la pareja, se convirtió en una tragedia para el muchacho.
Por fortuna para el bromista, la confesión de Britney también resultó ser broma. Ella ya se había dado cuenta de la cámara oculta.
0 comentarios:
Publicar un comentario